En tu mejilla
de helado diamante
cuajo mi llanto.
Todas mis nadas
desfallecen exhaustas
en tus silencios.
Estrella fugaz
brillaste en mi cielo
potente amor.
Reverberación
de llanto y quimera
fragua mi dolor.
Noche sin trinos.
Ensordecen los gritos
de alas mustias.
Imperturbable
infinita ausencia
trota mi cielo.
Dolor de mayo
que te quitó la vida
desafiándome.
Alma latidos
templos de tu ausencia
bullen errantes.
Delirios grises
palpando en las sombras
tus haces de luz.
Silvia Alicia Balbuena
Argentina
© 2016
Gracias por esta publicación. Escribo muchos Siglemas, es un desafío que me atrapa. Y es este uno de mis más queridos
ResponderEliminarGracias a ti por tu participación y entusiasmo, querida Silvia; ¡adelante! Abrazos cariñosos.
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